Ya hemos hablado de este caso, dando antecedentes sobre el apagón en Gerona y transcribiendo un reportaje. que trae luz sobre el tema. Ahora más información para seguir el caso.
La rebelión de más de 130 alcaldes de Gerona contra la compañía eléctrica Fecsa-Endesa es una etapa más en la lucha que mantienen las comarcas de esta provincia para normalizar una situación que dura demasiado. De hecho, en el verano del 2006 estuvo a punto de ‘caerse’ la línea eléctrica porque se disparó el consumo puntualmente debido a la demanda de la Costa Brava.
Algunos alcaldes han propuesto ahora a sus colegas no pagar la luz. Otros, cambiar de compañía. E incluso el alcalde de Lloret, Xavier Crespo, ha instado a la intervención de Endesa por parte de la Generalitat. Todo ello, claro, aparte de las indemnizaciones correspondientes por estar casi una semana a oscuras.
Sus problemas, sin embargo, eran de sobras conocidos por los ediles, por las compañías y por los políticos. “Gerona no dispone de una red mallada de 400 kilovoltios, necesaria para atender su consumo, es decir, no cuenta con los mismos estándares de calidad que el resto de España. Esta situación dificulta claramente su desarrollo”, detalla un informe realizado por Red Eléctrica Española (REE) el pasado año, donde alertaba sobre las insuficiencias de las infraestructuras eléctricas de esta provincia -agravadas por la gran demanda que tiene la Costa Brava- y al que ha tenido acceso El Confidencial.
Algunos alcaldes han propuesto ahora a sus colegas no pagar la luz. Otros, cambiar de compañía. E incluso el alcalde de Lloret, Xavier Crespo, ha instado a la intervención de Endesa por parte de la Generalitat. Todo ello, claro, aparte de las indemnizaciones correspondientes por estar casi una semana a oscuras.
Sus problemas, sin embargo, eran de sobras conocidos por los ediles, por las compañías y por los políticos. “Gerona no dispone de una red mallada de 400 kilovoltios, necesaria para atender su consumo, es decir, no cuenta con los mismos estándares de calidad que el resto de España. Esta situación dificulta claramente su desarrollo”, detalla un informe realizado por Red Eléctrica Española (REE) el pasado año, donde alertaba sobre las insuficiencias de las infraestructuras eléctricas de esta provincia -agravadas por la gran demanda que tiene la Costa Brava- y al que ha tenido acceso El Confidencial.
“Entre 2001 y 2007, la demanda de electricidad en Cataluña se ha incrementado en más de un 18%, y en Gerona el consumo máximo ha aumentado un 32% entre los años 2002 y 2006”, continúa el informe. Pero éste no es el problema: la provincia sólo genera el 10% de la electricidad que consume. “En las condiciones actuales, no hay capacidad de red para suministrar energía a nuevos clientes de medio-gran consumo”, dice REE.
Ahora, la zona tendrá un problema añadido: “El futuro desarrollo del Tren de Alta Velocidad compromete aún más la situación eléctrica en Gerona. El TAV supone una demanda añadida que, además, exige una estabilidad y calidad del suministro eléctrico que sólo una línea de 400 Kv como la proyectada puede asegurar. Con una línea de menor tensión, las cargas que requiere el TAV provocarían caídas de tensión y distorsiones en la red disminuyendo la calidad del servicio al resto de los consumidores”.
Ahora, la zona tendrá un problema añadido: “El futuro desarrollo del Tren de Alta Velocidad compromete aún más la situación eléctrica en Gerona. El TAV supone una demanda añadida que, además, exige una estabilidad y calidad del suministro eléctrico que sólo una línea de 400 Kv como la proyectada puede asegurar. Con una línea de menor tensión, las cargas que requiere el TAV provocarían caídas de tensión y distorsiones en la red disminuyendo la calidad del servicio al resto de los consumidores”.
La conclusión es clara: si el AVE hubiese estado operativo, el apagón del noreste hubiese sido todavía mucho más grave. Y todo, según el informe, debido a la inexistencia de la interconexión con Francia, demonizada por Iniciativa per Catalunya (ICV) e incluso por Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). “La interconexión eléctrica entre España y Francia consta actualmente de cuatro líneas: dos en el País Vasco (Arkale-Argia y Hernani-Argia), una en Aragón (Biescas-Pragneres) y otra en Cataluña (Vic-Baixàs). Tiene una capacidad comercial total de intercambio de 1.400 megavatios, es decir, representa sólo un 3% del actual máximo de demanda de la Península, muy lejos del 10% que estableció la Unión Europea como nivel mínimo en la Cumbre de Barcelona de 2002”.
Pero la interconexión no sólo repercute en la calidad del servicio: la línea de muy alta tensión a la que se oponen ICV y ERC permitiría doblar el suministro “y las tarifas de la electricidad bajarán, equiparándose a las de los países de la zona”.La opinión de un experto
Josep Maria Rovira, vicedecano del Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña, es claro al analizar el problema: “El apagón que han sufrido las comarcas hace unos días está ligado a la insuficiencia de las infraestructuras. Gerona es abastecida por dos líneas de 220 Kv desde Vic.
Una de estas líneas falló, al mismo tiempo que varias de 110 Kv, y la otra no pudo aguantar. El primer fallo se hubiera podido minimizar si la línea de 400 Kv estuviera en funcionamiento. Por lo menos, la ciudad de Girona y las zonas urbanas no se hubiesen visto afectadas”, señaló a El Confidencial.
Para este ingeniero, los tendidos están diseñados conforme los reglamentos del Ministerio de Industria. Estas normas, por ejemplo, no prevén que en las líneas a la orilla del mar se formen “manguitos de hielo” en los cables, que son los que, por su peso, pueden partir el tendido o hacer caer las torres. “Es lógico que así sea, porque normalmente no nieva en las playas. La solución, pues, es reforzar todas las líneas, pero... ¿esto cuánto vale? ¿Y quién lo paga? La respuesta es: todos. ¿Y la gente estará dispuesta a rascarse el bolsillo para solucionar algo que pasa cada equis años o que puede ser que no ocurra de nuevo hasta dentro de 50 años? El propio director general de Energía de la Generalitat, Agustí Moure, reconoció que no había que tocar nada, ya que lo que se ha producido es una situación extraordinaria”.
Rovira señala que “no hay indicios de que no se haya hecho el mantenimiento que toca. Ni a mí ni al consejo nos consta que haya habido dejadez por parte de las compañías eléctricas. Ellas nos dicen que han invertido más de lo que estaba previsto. El Plan Tramuntana, por ejemplo, preveía hacer 40 subestaciones pero no se ha podido llevar a cabo en su totalidad porque ha habido instancias o ayuntamientos que se han opuesto a las conexiones o a las obras de estas subestaciones. Es decir, que si no se ha cumplido no es porque no hayan querido, sino porque ha habido dificultades ajenas a las propias compañías”.
El directivo del Colegio afirma también que “hay que poner un poco de racionalidad en este asunto”. Y añade que no es partidario de inundar el territorio de infraestructuras, “pero no hay otro remedio. Hay necesidades de una comunidad que no puede ver cercenado su progreso porque no se les da este servicio”. ¿La solución? Además de la interconexión con Francia, se piensa en la construcción de una central de ciclo combinado en la localidad de Celrà, cerca de Girona, de 800 MW para abastecer a la Costa Brava. Y ello requiere “una red fuerte a la que poderse conectar”. Habrá que ver si la solución técnica se deja hacer ahora.
Tomado del diario El Confidencial de España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario