Las dos empresas eléctricas que operan en las Islas, Red Eléctrica de España -REE- (transportista) y Unelco-Endesa (generador) ayer airearon sus diferencias en una comisión parlamentaria a la que acudieron para dar explicaciones por los últimos apagones que han sufrido las Islas y, en concreto, los tres más recientes de Tenerife (el 26 de marzo de 2009 y el 18 de febrero y el 1 de marzo de 2010).
En su afán por dejar claro que ambas han actuado de forma correcta ante las incidencias que han provocado esos apagones, las dos empresas chocaron en cuanto a la eficacia de la protección de los sistemas eléctricos de las Islas.
De esta manera, el director general de Unelco, Pablo Casado, lo primero que dijo tras reiterar el compromiso de inversión de su compañía en las Islas fue que después de los últimos dos apagones totales en Tenerife, su empresa reajustó los parámetros de protección de la Isla con un cambio del "perfil de riesgo" del sistema para evitar que se vuelvan a dar "ceros totales" si se reproducen las mismas condiciones que originaron esos apagones.
Pero el director regional de REE, Santiago Marín, dejó claro al inicio de su intervención que su visión del asunto "no coincide plenamente" con la de Unelco y aseveró que existe una "inadecuada configuración de la protección de los sistemas" para aislarlo en caso de que se produzca un corte.
Según Marín, el sistema de salvaguarda que debió aislar los tendidos para evitar el apagón total también falló. "Los mecanismos no funcionaron ni evitaron que se propagaran los cortes", reiteró antes de criticar la "inadecuada" respuesta de los transformadores de la subestación de Candelaria. Casado admitió que "un corte no debe producir un apagón total", pero aclaró que, en el caso de Tenerife, el 80% de la electricidad se genera en el sur, mientras que el 80% de la demanda está en el norte. "Se produce así un desequilibrio que no soporta el sistema".
El director general de Unelco replicó que el problema reside "no en la propia protección, sino en la coordinación" entre la protección de la generación y la distribución de la electricidad. Casado aseguró que su empresa ya trabaja en este aspecto y que ha puesto en marcha un análisis de esta coordinación para tomar medidas al respecto.
"Desde 1991 no se producían apagones totales en Tenerife", recordó Casado. "De eso hace casi 20 años, y las protecciones son las mismas", justificó después de insistir en que los fenómenos adversos que originaron dos de los tres últimos apagones en la Isla "fueron de una intensidad muy fuerte".
Marín también se refirió a los desequilibrios entre los centros generadores y los principales núcleos de demanda cuando explicó que las subestaciones que suministran el fluido a Santa Cruz de Tenerife (Candelaria) y Las Palmas de Gran Canaria (Jinámar) actúan como "verdaderos cuellos de botellas". Son un "enorme problema", remató.
Tomado del diario El Día de España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario