Tierra del Fuego 1.065. Allí nadie se queda a oscuras cuando hay cortes, la luz se filtra por amplios ventanales con vistas paisajísticas, el agua está calentita y los ambientes templados. Como si fuera poco, las facturas de gas y energía eléctrica vienen mermadas, no tan perniciosas para el bolsillo.
Es el primer edificio bioclimático de Tandil, y está en condiciones de recibir una certificación “green building”, anhelado por grandes compañías privadas. LA VOZ lo recorrió junto a su dueño y autor, el arquitecto Enrique Rodríguez.
El edificio consta de 6 pisos. La parte superior (3 plantas) y el estudio, se nutren con energías renovables. El diseño bioclimático permite aprovechar las condiciones del tiempo a favor del hábitat. Además, se aprovechan las fuentes alternativas como la solar, solar térmica y fotovoltaica. Asimismo, se incorpora la energía eólica (viento) y artilugios como un “muro trombe –acumulador-”, aportan una gran masa térmica y calefacción al ambiente interno. Esto hace que la habitación puede suplir las 3 estufas convencionales con sólo una.
A su vez, logran ahorrar entre un “65 %” de gas y un 30 % de energía eléctrica. Un modelo solar térmico, calienta el agua en la parte superior, en tanto se instaló con un by pass con el sistema convencional de termotanque a gas. Mientras que otro módulo térmico climatiza una pequeña piscina “jacuzzi” en el tercer piso.
“En verano, cada panel colector puede recibir una temperatura de 80 %, pero esa temperatura se distribuye con el agua de la pileta”, explicó el profesional. Por otro lado, en destilador de energía solar genera agua destilada para las baterías. El perfil fotovoltaico dota de iluminación en 2 habitaciones y la sala de baterías.
Otro circuito independiente, con un aerogenerador de pequeñas dimensiones y regulador para evitar el recalentamiento de baterías, constituye la pata eólica del complejo. “Se corta la energía de red y el edificio tiene luz”, ejemplificó el especialista sobre las ventajas del moderno diagrama. También en la ciudad, Rodríguez diseñó una casa del barrio cerrado sito frente a la Ruta 226 (a la altura de “El Paraíso”), de 450 m2 con diseño bioclimático, cuya pileta de gran tamaño posee una instalación subterránea preparada para recibir hasta 20 colectores solares planos y calentar así el agua. Así se reducen las emisiones de dióxido de carbono y gases de efecto invernadero a la atmósfera en un estimado de entre 15 y 20 toneladas anuales.
Los costos son mayores si se compara con la construcción tradicional. De todos modos, se compensa con los años, y genera ahorros, además de que una conexión by pass alarga la vida útil de los artefactos con energías renovables.
Un sistema solar térmico (calefón solar) cuesta unos 2.500 dólares para 4 personas, contra un termotanque convencional oscila en los 400 dólares. Un quit fotovoltaico, siempre dependiendo del nivel de consumo, puede salir 10.000 pesos, contando acumulador, batería, paneles de 60 w.
La tendencia mundial, sobre todo de la mano de Europa, encamina las políticas públicas hacia las energías alternativas. En Alemania, se lanzó un plan de 10.000 techos solares y pica en punta. Cuando la Argentina todavía carece de un “proyecto serio a largo plazo”, evaluó el arquitecto. Uruguay y Brasil sí parecen darle importancia a la cuestión. En nuestro país “comenzaron las primeras licitaciones de energías renovables, pero las autoridades no están empapadas y tocan de oído, al no ver las responsabilidades a futuro”, argumentó Rodríguez.
“En nuestro país hay pequeñas pero buenas intenciones. Es una tierra muy grande con razones naturales que, por ejemplo, le permitirían explotar la energía eólica de la Patagonia para extraer la energía del futuro: el hidrógeno. El sur de la Provincia posee buenos vientos”, marcó el arquitecto.
La Argentina produce unos 30 MW de energía eólica contra 22.000 MW de Alemania; España y EEUU 14.000 MW; Brasil, 250 MW y Costa Rica, 74 MW. Sin embargo, Rodríguez trabaja desde el pago chico por modificar algunos patrones culturales, y convencido de instalar estos temas en la educación, planea acordar una experiencia pedagógica con las escuelas técnicas de Tandil. Al mismo tiempo, ya mantuvo una entrevista con el secretario de Planeamiento y Obras Públicas del municipio, Mario Civalleri, a quien le entregó una carpeta con un proyecto sobre energías renovables en el partido de Tandil, 2010.
Es el primer edificio bioclimático de Tandil, y está en condiciones de recibir una certificación “green building”, anhelado por grandes compañías privadas. LA VOZ lo recorrió junto a su dueño y autor, el arquitecto Enrique Rodríguez.
El edificio consta de 6 pisos. La parte superior (3 plantas) y el estudio, se nutren con energías renovables. El diseño bioclimático permite aprovechar las condiciones del tiempo a favor del hábitat. Además, se aprovechan las fuentes alternativas como la solar, solar térmica y fotovoltaica. Asimismo, se incorpora la energía eólica (viento) y artilugios como un “muro trombe –acumulador-”, aportan una gran masa térmica y calefacción al ambiente interno. Esto hace que la habitación puede suplir las 3 estufas convencionales con sólo una.
A su vez, logran ahorrar entre un “65 %” de gas y un 30 % de energía eléctrica. Un modelo solar térmico, calienta el agua en la parte superior, en tanto se instaló con un by pass con el sistema convencional de termotanque a gas. Mientras que otro módulo térmico climatiza una pequeña piscina “jacuzzi” en el tercer piso.
“En verano, cada panel colector puede recibir una temperatura de 80 %, pero esa temperatura se distribuye con el agua de la pileta”, explicó el profesional. Por otro lado, en destilador de energía solar genera agua destilada para las baterías. El perfil fotovoltaico dota de iluminación en 2 habitaciones y la sala de baterías.
Otro circuito independiente, con un aerogenerador de pequeñas dimensiones y regulador para evitar el recalentamiento de baterías, constituye la pata eólica del complejo. “Se corta la energía de red y el edificio tiene luz”, ejemplificó el especialista sobre las ventajas del moderno diagrama. También en la ciudad, Rodríguez diseñó una casa del barrio cerrado sito frente a la Ruta 226 (a la altura de “El Paraíso”), de 450 m2 con diseño bioclimático, cuya pileta de gran tamaño posee una instalación subterránea preparada para recibir hasta 20 colectores solares planos y calentar así el agua. Así se reducen las emisiones de dióxido de carbono y gases de efecto invernadero a la atmósfera en un estimado de entre 15 y 20 toneladas anuales.
Los costos son mayores si se compara con la construcción tradicional. De todos modos, se compensa con los años, y genera ahorros, además de que una conexión by pass alarga la vida útil de los artefactos con energías renovables.
Un sistema solar térmico (calefón solar) cuesta unos 2.500 dólares para 4 personas, contra un termotanque convencional oscila en los 400 dólares. Un quit fotovoltaico, siempre dependiendo del nivel de consumo, puede salir 10.000 pesos, contando acumulador, batería, paneles de 60 w.
La tendencia mundial, sobre todo de la mano de Europa, encamina las políticas públicas hacia las energías alternativas. En Alemania, se lanzó un plan de 10.000 techos solares y pica en punta. Cuando la Argentina todavía carece de un “proyecto serio a largo plazo”, evaluó el arquitecto. Uruguay y Brasil sí parecen darle importancia a la cuestión. En nuestro país “comenzaron las primeras licitaciones de energías renovables, pero las autoridades no están empapadas y tocan de oído, al no ver las responsabilidades a futuro”, argumentó Rodríguez.
“En nuestro país hay pequeñas pero buenas intenciones. Es una tierra muy grande con razones naturales que, por ejemplo, le permitirían explotar la energía eólica de la Patagonia para extraer la energía del futuro: el hidrógeno. El sur de la Provincia posee buenos vientos”, marcó el arquitecto.
La Argentina produce unos 30 MW de energía eólica contra 22.000 MW de Alemania; España y EEUU 14.000 MW; Brasil, 250 MW y Costa Rica, 74 MW. Sin embargo, Rodríguez trabaja desde el pago chico por modificar algunos patrones culturales, y convencido de instalar estos temas en la educación, planea acordar una experiencia pedagógica con las escuelas técnicas de Tandil. Al mismo tiempo, ya mantuvo una entrevista con el secretario de Planeamiento y Obras Públicas del municipio, Mario Civalleri, a quien le entregó una carpeta con un proyecto sobre energías renovables en el partido de Tandil, 2010.
Tomado del diario La Voz de Tandil de la hermosa ciudad de Tandil , provincia de Buenos Aires, Argentina.
1 comentario:
Excelente, buen blog doy gracias por subir informacion de las especialidad de ingenieria electrica donde nos detalla a los equipos e datos , fotos para su mejor comprensiom ,es epro que sigan difundiendo la informacion, una vez mas gracias.
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