Por quinta ocasión fue atacada la línea de Transmisión de Transportes de Electricidad de Occidente, que conecta la planta Hidro-Xacbal con el Sistema Nacional Interconectado. Esta vez fueron derribadas tres torres. “Se trata de un acto terrorista”, afirmó el gerente general de la empresa de transmisión de fluido, Edwin Hernández.Costo diario: Q640 mil (aproximadamente 80 mil dolares)
El ejecutivo explicó que personas aún no identificadas realizaron un sabotaje a la base de una de las torres. Esto la debilitó e hizo que cediera bajo su propio peso. Luego se produjo una reacción en cadena con las torres vecinas. “Entendemos que el Ministerio Público está actuando; es un tema de país y debe actuar de oficio”, agregó.
De acuerdo con el director ejecutivo de la Asociación Nacional de Generadores (ANG), Horacio Fernández, el costo diario por la salida del sistema de la Hidroeléctrica Xacbal es de Q640 mil, “pérdidas que deberán absorber los consumidores de la electricidad”.
“Como gremio, creemos que no podemos dejar pasar esta situación sin manifestar públicamente nuestra profunda preocupación; son actos que se cometen impunemente, en vista de que el Estado no ejecuta las acciones para capturar a estos delincuentes que desde noviembre han derribado torres”, enfatizó.
Sin freno
El nuevo ataque a la línea de transmisión detuvo la generación de Hidro-Xacbal, al imposibilitar el envío del fluido al sistema. “Al salir su producción debe ser reemplazada por plantas que utilizan combustibles fósiles, las cuales tienen mayores costos y generan más gases de efecto invernadero”, expuso Hernández.
A pesar de que se incrementó el patrullaje militar, de que hay investigaciones y de que se conformó un Comité de Crisis, los ataques continúan y “no se tiene por el momento una solución para frenarlos”, puntualizó Hernández (lea: Más ataques).
El ministro de Energía y Minas, Romeo Rodríguez, expresó sentirse muy preocupado, pues estos ataques “alejan las inversiones”, y añadió: “Desde las siete de la mañana de hoy (ayer) estuvimos reunidos con los ministros de la Defensa Nacional y de Gobernación, quienes son los encargados de la seguridad, a fin de intercambiar información que ayuden a las investigaciones y así aplicar todo el peso de la ley”.
Rodríguez descartó que se trate de toda la población del lugar la que está tras estos ataques. “Es un grupo que no tiene que ver con la comunidad”, añadió.
Hernández agregó que como empresa continuará exigiendo a las autoridades cumplir con su labor, y que mantendrá la relación y “cooperación con las autoridades, el sector privado organizado, las asociaciones gremiales como ANG y la Cámara de Industria”.
El ejecutivo agregó que evalúan el ambiente de inversión para negocios futuros.
Tomado del diario Siglo XXI de Guatemala.
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